Señor
, Amado Padre, que
por tu gran amor otorgaste a San Joaquín y a Santa Ana la gracia de engendrar a
la Santísima Virgen.
Humildemente
te pedimos
por su intercesión que bendigas a todos los abuelos, especialmente a los que
pasan grandes necesidades.
Mira
con amor a los abuelos de todo el mundo y protégelos, ya que son una
fuente de enriquecimiento para las familias y para toda la sociedad.
Haz
que sean maestros de sabiduría y valentía, que transmitan a generaciones
futuras los frutos de su madura experiencia humana y espiritual.
Te
pedimos
que sean comprendidos en sus debilidades, asistidos en sus necesidades y
respetados por sus familias y la Sociedad.
Que
jamás sean ignorados o excluidos, sino que encuentren respeto y amor, ayúdales a vivir
serenamente y a sentirse acogidos durante todos los años de vida que
les concedas.
Padre
mío,
ellos miran hacia
atrás
y ven todo el camino
recorrido, desde
las travesuras de la infancia hasta la fragilidad del ahora.
Retira Señor toda la amargura de sus espíritus y
que recuerden con preferencia los hechos agradables y felices.
Te
pedimos
Jesús, nieto divino de Ana y Joaquín, que los abuelos puedan introducir a sus
seres queridos en el mundo de la fe.
Amén.
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