En el
nombre de Dios Padre Todopoderoso, clamo por ti amado San Miguel
Arcángel, junto
a tu
séquito de ángeles promotores de la fe, amor, guía, luz y protección divina,
para que
entren en mi hogar y lo impregnen con la grandeza del Señor.
Se divino San Miguel Arcángel, el guardián de éste recinto y de todos sus habitantes, (decimos los nombres completos de cada uno).
Grandioso
Arcángel de la paz y el perdón, libra este hogar y a quienes viven en él de
todo mal, y
con
tu espada de justicia defiéndenos
de
todo enemigo, espiritual y terrenal, visible e invisible, del engaño,
la tentación, la ira, de la envidia y la angustia.
Permite
que tus alas sean nuestro abrigo, contra las inclemencias, el
maligno y sus demonios, contágianos
con
tu fuerza para defendernos de los peligros, y hacer de ésta casa un refugio contra la
maldad.
Purismo San Miguel Arcángel, digno mensajero de Dios, pisotea los sentimientos y emociones negativas en éste hogar, así como cualquier brujería, trabajo, daño, hechicería o maleficio lanzado hacia nosotros.
Dirige
celestial Arcángel, a los malos espíritus hacia donde pertenecen, purifica
cada
rincón de ésta morada, para que podamos continuar con la voluntad de
Dios, y obtener
completamente sus bendiciones.
Bienaventurado Arcángel Miguel, te lo pedimos con humildad,
confiando
en tu poderosa intercesión
ante
el Todo
poderoso, pues tu
eres el indicado para hacerle llegar nuestro mensaje de necesidad, y así
mismo ser el soporte espiritual a lo largo de nuestras vidas.
Amén.
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