Yo
(decimos nuestro nombre completo sin abreviaturas), invoco a los seres
elementales, protectores de la tierra, la naturaleza y las criaturas que
en ella habitan.
Asístanme por favor, para que la lechuza que se posa en mi hogar y cerca de mi continuamente, siga su camino, pues me siento agredido y temeroso con su presencia, y aún así no pretendo ni deseo dañarla para que se retire.
Lleven a ésta ave a un mejor lugar, donde pueda vivir tranquila, que si alguien la estuviera utilizando, para espiar y llevar energías negativas, pestes o trabajos malignos, sea roto ese vínculo maligno, para que la lechuza sea libre de irse y buscar un hogar adecuado.
Si
el mensaje de ésta ave es positivo, grandiosos elementales, ayúdenme
a
entenderlo, para
que
ambos podamos continuar con nuestros caminos, y yo no continúe estando
equivocado.
Ayúdenme poderosos seres, para que no me sienta agraviado, si no es la intención de ésta lechuza afectarme, y a que se aleje si me trae el mal.
Por
ello les ofrezco la luz de éstas velas moradas, para transformar
lo negativo en positivo, de éstas velas rosas para calmar la ira,
desprecio y agresión que pudiera estar afectando a la lechuza y a mi, el viento
saturado de de éste
incienso para limpiar el ambiente, y abrir los caminos a la paz y libertad de
ambos, y
la
rama como símbolo del que el lugar adecuado de ella no es aquí.
Escuchen mi ruego, y permitan que la lechuza vuele lejos de mi, que se pose en otra rama que será más cómoda, y que tanto mi tranquilidad como la del ave se estabilicen, separados el uno del otro.
Que así sea, así se haga y así será.
Por mi casa acaba de pasar 2 lechuzas.
ResponderEliminarDios quiera que no pase nada.