Oh¡
bendito y bienaventurado San Pantaleón, mártir por amor a Dios, y médico
por amor al prójimo, te doy las gracias por ser nuestro sanador.
A
ti
que haces tanto bien en la tierra, sanando enfermedades y padecimientos a quien
llega y solicita tu ayuda, te invoco con fe y esperanza, para
solicitar tu santo poder de alivio, a las enfermedades del hombre.
Te
lo pido,
pues
se que Dios te concedió el don de ser nuestro valioso y poderoso
mediador, y a través de ti, desde las Alturas, otorgarnos numerosos milagros y
darles salud a los enfermos.
Buen
santo
Pantaleón, aclamado por tus sentimientos puros e incondicionales, protege
a los enfermos y guía a los médicos que los tratan para sanarlos, para que
pronto puedan recuperar su bienestar.
Poderoso
protector de la salud humana, necesitamos ahora más que nunca tu
asistencia, para que no suframos más por las enfermedades antiguas y
nuevas, que limitan nuestras vidas y merman nuestros cuerpos.
Amplia
la sabiduría de quienes crean los medicamentos, y que así como se
fortalecen los virus y enfermedades con el tiempo, también se fortalezcan
con tu bendición nuestras defensas.
Aleja
el dolor y el sufrimiento, que las enfermedades causan en
nosotros, mantén vivo en todo momento nuestro ánimo y esperanza, y acelera
nuestra curación y resistencia.
San Pantaleón amado, por tus méritos, por tu gran corazón y generosidad te ruego que nos asistas, que sea escuchada cuanto antes nuestra plegaria, y hagas llegar mis peticiones a Dios, para que no quede ni una persona sin su protección.
Amén.
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