Divino Señor, poseedor del poder infinito de la creación universal, te pido que abras a la trascendencia, la mente de (decimos el nombre completo de la persona), y no permitas que continúe atascado en la vanidad y las tentaciones materiales.
Te ruego bendito Creador de las maravillosas emociones y sentimientos, que le ayudes a (decimos el nombre completo de la persona), a encontrar un equilibrio en ellas, pues algunas han crecido sin medida, tanto, que le están provocando serios problemas en su vida personal, y en su cotidiana convivencia con quienes lo aman y rodean.
Bríndale la gracia de vivir con el corazón abierto a tus designios y bendiciones, para que encuentre el equilibrio en su ser, y se dé cuenta que la mejor forma de ser feliz y estar seguro para no ser lastimado, no es encerrándose en sí mismo, sino viviendo cada experiencia sin temor, respetando a si prójimo, incluso si él no lo respeta, pues cada quien obtendrá las consecuencias de sus actos según su comportamiento.
Envíale a (decimos el nombre completo de la persona), la luz que necesita para ver claramente su error, y las hermosas oportunidades que está perdiendo por su egolatría desmedida, así como también el daño que ha hecho y puede hacer, a quienes lo queremos y le deseamos sólo bendiciones.
Llénalo Señor de tu misericordia y amor, para que sea capaz de equilibrar su ego exagerado, y ponga en práctica los valores que nos has enseñado, despierta su consciencia, para que, de ahora en adelante, no continúe alimentando esta egolatría que lo consume y oscurece su alma poco a poco.
Te lo rogamos bendito Padre, escucha nuestra oración, y encuentra a (decimos el nombre completo de la persona), digno de tu clemencia y guía, pues la merece y necesita.
Te agradezco desde ahora tu santa intervención, pues en ti confío hoy y siempre, por los siglos de los siglos.
Amén.
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