Bendice, Señor, por favor, mi auto, mantén alejados todos los peligros
y trampas del enemigo.
Los santos ángeles vienen a vigilarme mientras conduzco,
ayuda a que siempre llegue con bien a mi destino,
que nada malo me pase durante el trayecto.
Protege todos los viajes que tendré que enfrentar hoy y todos los días,
pon una mano sobre mi cabeza
y guíame por todos los caminos oscuros que no podré ver.
Oh amado Señor, protégeme día y noche,
Los días que sean ocupados este vehículo,
Estaré manejando de forma pacifica
Para llegar con bien hasta mi hogar.
Que tu bendición permanezca siempre conmigo.
Por Cristo nuestro Señor.
Amén
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