Glorioso San Cayetano, fiel servidor de Dios y protector de los que buscan trabajo y sustento, hoy me acerco a ti con humildad y esperanza, sabiendo que tu amor y tu intercesión pueden abrir puertas donde parece no haber salida.
Te pido, San Cayetano, me des la oportunidad de encontrar el trabajo adecuado rápido, pues tu más que nadie sabes que lo necesito urgente, por favor, abre las puertas que están cerradas, que se me ofrezcan las oportunidades que necesito y que mi vida laboral se estabilice pronto.
Ayúdame a preparar mi corazón y mi mente para reconocer las oportunidades que Dios ha puesto en mi camino. Dale luz a mis decisiones, para que pueda elegir sabiamente y con confianza el trabajo que más se ajuste a mis habilidades y necesidades.
Te ruego San Cayetano querido, que ese trabajo que tanto espero llegué pronto. Cúbreme con tu manto protector, dame la paz necesaria para no caer en la desesperación y la angustia mientras busco un empleo. Que mi fe en Dios sea firme y que siempre recuerde que Él no me abandona.
San Cayetano, patrono de los trabajadores y de aquellos que buscan sustento, confío en tu intercesión y en tu generosidad.
Te agradezco profundamente por tu bondad, San Cayetano, y por escuchar mi llamado en este momento de necesidad.
Amén.
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