Envío este llamado de auxilio, a los poderosos y sabios seres elementales, que nunca han defraudado a la madre naturaleza, y han castigado incansablemente a quien lo merece.
Lo hago con el fin de que me asistan en este ritual, para cargar esta piedra preciosa (semipreciosa), con toda su gran capacidad, para contener energías y entidades negativas, y así logre capturar en su interior a la que ronda mi hogar, (o en su defecto, el hogar de, decimos el nombre completo de la persona a la que se dedica el ritual), y me (le) quita la tranquilidad a mí (él o ella), y a mis (sus) seres queridos.
A ustedes grandiosos elementales, les ruego por su intervención, para que, por medio de este ritual, sea atraída dicha entidad oscura al interior de esta piedra, como castigo y resultado por sembrar el terror e incertidumbre, a quienes nada han hecho para merecerlo, al menos no de manera consciente.
Hagan posible que esta roca, que es naturalmente un contenedor de energías negativas, sea irresistible para los seres oscuros, engañándolos para entrar en ella, creyendo que su luz es la energía inocente, de una persona vulnerable a quien pueden torturar a placer.
Abran un portal debajo de este ritual, para que, de ser muchas las entidades negativas que me (les) rondan, esta piedra contenga a las más posibles, y el resto sean devueltas a su lugar de origen, cerrando el portal justo detrás de ellas.
Pido su contención para retirarles su libertad, pues considero que ya han causado suficiente daño de manera desmedida, y mientras estén dentro de esta piedra, podremos controlar sus energías, y canalizadas para realizar trabajos controlados, en los que ellos no sean ellos quienes puedan decidir a quién influir, ni la manera de hacerlo.
Estoy confiado en que me asistirán, pues ustedes mejor que nadie, saben lo mucho que puede afectar a la energía equilibrada de la madre naturaleza misma, que estas entidades oscuras ronden sin control alguno.
Se los pido con respeto e infinita fe en que me ayudarán, y a cambio prometo hacer todo lo que me sea humanamente posible, para difundir esta confianza en ustedes, y en sus dones, capacidades, poderes y ayuda, que nos son brindados ante la presencia del mal, las penumbras y los que en ella se esconden.
Decreto que, así sea, así se haga y así será.
