Espíritu Santo, fuente de toda sabiduría, te pido ilumines mi mente y mi corazón. Guíame en cada uno de mis pensamientos, decisiones y acciones. Abre mis ojos para ver la verdad, mis oídos para escuchar tu voz en mi interior, y mi corazón para recibir tu amor y tu sabiduría divina.
Te ruego que en este primer día me concedas la claridad necesaria para enfrentar las dificultades que estoy viviendo. Que tu luz ilumine mi camino y que tu fuerza me impulse a avanzar con fe y valentía. Espíritu Santo, quiero sentirte cerca y saber que estoy bajo tu protección.
Espíritu Santo, fuente de todo consuelo, en este segundo día te pido que infundas en mí fuerza y valentía para enfrentar los desafíos que tengo por delante. Lléname de paz y esperanza, y que en momentos de angustia o desesperación pueda encontrar consuelo en tu amor.
Dame el coraje para seguir adelante, incluso cuando las dificultades se presenten. Dame confianza, pues sé que tú me sostienes y me guías.
Espíritu Santo, fuente de toda paz, en este tercer y último día de mi oración, te pido que derrames tu paz sobre mi vida. Que tu gracia me cubra, y que me ayudes a soltar todo lo que me impide vivir en armonía y serenidad.
Dame la capacidad de perdonar y de vivir en unidad con los demás, sabiendo que todo es parte de tu plan divino.
Te doy gracias, Espíritu Santo, por escuchar mi oración. Confío en que me has acompañado durante estos tres días y que seguirás guiándome con tu amor eterno. Que todo lo que he pedido se cumpla de acuerdo con la voluntad de Dios.
Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario